La búsqueda de un lenguaje propio: La SERIE FOTOGRAFICA DE ARQUITECTURA
Quizás fuera en 1970, cuando descubrí las series fotográficas de mano de Duane Michals, Richar Egli, Thomas L. Davies, Francois Bertin y otros.
En la serie fotográfica, cada imagen se relaciona con la que le precede y con la que le sucede creando con ello un lenguaje, que puede ser mucho más interesante y rico que con la imagen única y donde existe una relación espacio-tiempo-imagen, siempre presente.
Hay lecturas entre líneas y de principio a fin; de izquierda a derecha; de arriba abajo o, incluso, todo lo contrario, con espacios y tiempos muertos que garantizan un lugar para la imaginación.
No hemos de buscar solo su esencia, en la realidad que nos presenta cada imagen, sino, también, en su interrelación con las demás.
Nada tiene que ver con un conjunto de imágenes sueltas. Toda ella forma una unidad indivisible.
Allí, donde se van sucesivamente relevando, surge “la chispa”, ese “no sé que” que posee “vivir la arquitectura” y que difícilmente puede ser expresado, de forma acertada, en la manera convencional.
Es el lugar donde toma su sentido la fotografía de arquitectura, diferenciándose de cualquier otro gesto o modo expresivo.
Desde 1980, no entiendo mis trabajos sobre arquitectura, si no son en Series Fotográficas y con esa idea sigo trabajando hasta el momento.
Posteriormente, y por desgracia, son transformados por clientes, directores de arte, maquetistas, secretarias, informáticos, y demás elementos del proceso editorial (los auténticos y reales críticos de la arquitectura española), en imágenes sueltas...
La visualización de la arquitectura a través de la fotografía, no ha de sustituir su vivencia pero, una arquitectura bien expresada, interpretada y relatada ha de dar una idea mejor y más clara, para su comprensión.
Es curioso como, en mis comienzos, me "presentaba" a fotografiar la arquitectura, con la lección bien aprendida; alzados, plantas y secciones del objeto a fotografiar, estaban en mi memoria con una alta precisión, dado el profundo estudio al que había sometido a la obra antes de realizar el reportaje.
Intensas horas de estudio, e intensas conversaciones, también, con el autor del proyecto formaban el bagaje del que me impregnaba antes de la realización del trabajo de campo.
Tremendo error de novato, aquella postura lógica de enfrentarme a una arquitectura…. Postura, esta, que se realizaba desde el planeamiento teórico y no desde la realidad. Fueron unos años con resultados fotográficos deficientes en cuanto a expresividad e interés. Las imágenes procedentes de estas racionales posturas no tenían ninguna expresividad. Eran imágenes vulgares.
Ahora, cuando realizó un reportaje, tras dos o tres días de trabajo de campo con distintas luces y en distintas situaciones, dejando que fuera la arquitectura el elemento motivante de mis imágenes, me presento en estudio con un conjunto grande de originales, a los que hay que dotarles de un argumento común, y esta vez, ya, racional…
Para saber más:
LA SERIE FOTOGRÁFICA EN LA ARQUITECTURA. Parte I
LA SERIE FOTOGRÁFICA EN LA ARQUITECTURA. Parte II
Quizás fuera en 1970, cuando descubrí las series fotográficas de mano de Duane Michals, Richar Egli, Thomas L. Davies, Francois Bertin y otros.
En la serie fotográfica, cada imagen se relaciona con la que le precede y con la que le sucede creando con ello un lenguaje, que puede ser mucho más interesante y rico que con la imagen única y donde existe una relación espacio-tiempo-imagen, siempre presente.
Hay lecturas entre líneas y de principio a fin; de izquierda a derecha; de arriba abajo o, incluso, todo lo contrario, con espacios y tiempos muertos que garantizan un lugar para la imaginación.
No hemos de buscar solo su esencia, en la realidad que nos presenta cada imagen, sino, también, en su interrelación con las demás.
Nada tiene que ver con un conjunto de imágenes sueltas. Toda ella forma una unidad indivisible.
Allí, donde se van sucesivamente relevando, surge “la chispa”, ese “no sé que” que posee “vivir la arquitectura” y que difícilmente puede ser expresado, de forma acertada, en la manera convencional.
Es el lugar donde toma su sentido la fotografía de arquitectura, diferenciándose de cualquier otro gesto o modo expresivo.
Desde 1980, no entiendo mis trabajos sobre arquitectura, si no son en Series Fotográficas y con esa idea sigo trabajando hasta el momento.
Posteriormente, y por desgracia, son transformados por clientes, directores de arte, maquetistas, secretarias, informáticos, y demás elementos del proceso editorial (los auténticos y reales críticos de la arquitectura española), en imágenes sueltas...
La visualización de la arquitectura a través de la fotografía, no ha de sustituir su vivencia pero, una arquitectura bien expresada, interpretada y relatada ha de dar una idea mejor y más clara, para su comprensión.
Es curioso como, en mis comienzos, me "presentaba" a fotografiar la arquitectura, con la lección bien aprendida; alzados, plantas y secciones del objeto a fotografiar, estaban en mi memoria con una alta precisión, dado el profundo estudio al que había sometido a la obra antes de realizar el reportaje.
Intensas horas de estudio, e intensas conversaciones, también, con el autor del proyecto formaban el bagaje del que me impregnaba antes de la realización del trabajo de campo.
Tremendo error de novato, aquella postura lógica de enfrentarme a una arquitectura…. Postura, esta, que se realizaba desde el planeamiento teórico y no desde la realidad. Fueron unos años con resultados fotográficos deficientes en cuanto a expresividad e interés. Las imágenes procedentes de estas racionales posturas no tenían ninguna expresividad. Eran imágenes vulgares.
Ahora, cuando realizó un reportaje, tras dos o tres días de trabajo de campo con distintas luces y en distintas situaciones, dejando que fuera la arquitectura el elemento motivante de mis imágenes, me presento en estudio con un conjunto grande de originales, a los que hay que dotarles de un argumento común, y esta vez, ya, racional…
Para saber más:
LA SERIE FOTOGRÁFICA EN LA ARQUITECTURA. Parte I
LA SERIE FOTOGRÁFICA EN LA ARQUITECTURA. Parte II
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